En Nueva York se encuentra de todo. Pizzas grandísima en Harlem, panaderías con especialidades en Grand Central Station, Delis para la clase media en Broadway y 5th Avenue, tapas cerca de Union Square. El globetrotter gastronómico huele, sabe, busca y se pierde.
La noche del Final de la Euro Copa me perdí en el norte del Retiro, en el barrio de Salamanca, escuchando al chapoteo del agua de la fuente en el jardín urbanístico del restaurante Iroco con una copa de Champagne de Mumm Rose. Un restaurante acogedor basado en una cocina internacional mezcla de tradición y fusión que ha marcado tendencia. Visitado por una clientela muy cosmopolita. El local es también uno de los primeros establecimientos de Madrid que incluyó el concepto de brunch a su oferta de fin de semana.
En la entrada del establecimiento saluda un bar elegante y brillo en un ambiente chic. Con esa creación se amplía la experiencia del restaurante y hace un local más global. Un espacio social perfecto para tapear y disfrutar del afterwork o reunirse con amigos para tomar unas copas hasta bien tarde.
El pasillo cruza el restaurante interior decorado con una línea clara. Un toque de color y el ambiente de la elegancia de los años 60.
El jardín del restaurante es una de los más bonitos de la capital. Fuera de la calle y los coches pitando y haciendo ruido, encontramos en pleno Madrid un oasis de relax y una revolución para los sentidos cansados del jaleo fútbol. Marginado por una muralla de ladrillo y plantas, vemos mesas que invitan a disfrutar de la comida y de la intimidad. Innumerables plantas, un estanque con una jarra románica, candelas ideales para parejas románticas, suelos de madera de teca. En el mismo huerto se cultivan hierbas, frambuesas y fresas para sus platos deliciosos.
Poniéndo tendencias está al corriente en gastronomía. Con la mejor materia prima, la que ofrecen los productores de la comunidad de Madrid. Carlos Núñez, su chef ejecutivo, ha elaborado una carta que mantiene la esencia cosmopolita de su cocina, pero en la que la materia prima local cobra especial protagonismo. De la Cuenca del Manzanares al noroeste, a la Comarca de las Vegas, al sureste. De la Sierra Norte, al noreste al la Comarca del Sur, al suroeste. Pasando por la cuenca del Guadarrama, del Medio Jarama, del Henares, la Sierra oeste y el área Metropolitana. La tierra de cada uno de estos rincones de la Comunidad de Madrid ofrece productos de una mejor calidad y un sabor exelente. Aceite, carne, queso, miel, verduras, frutas, hortalizas… Descubrimos su procedencia y nos acerca a una cultura gastronómica tan rica como desconocida.
Al gallego Carlos Núñez se agradece el éxito y la elaboración de los platos con ingredientes de la región. Formado en Hostelería y Turismo en Barcelona y en Gestión en el IE Business School. Carlos ha estado ligado al mundo de la alta cocina desde el año 1994, cuando comenzó a trabajar como cocinero en el Restaurante el Racó de Can Fabes de Sant Celoni, con tres estrellas Michelín.
Joven, sumiller y premiada con una Mención de Honor a la Mejor Sumiller de Madrid por los premios La Luna de Metrópoli 2011. Hablamos de la bien conocida Carmen González, la nueva directora de Iroco. Una mujer con buen gusto y detallista, que habla a parte de castellano, catalán, inglés y francés.
Iroco – Calle de Velázquez, 18 – 28001 Madrid – http://www.restauranteiroco.es
Vidaaustera recomienda este restaurante y le invita probar el pan de elaboración propia.
Texto: Rukiye Kilic
Fotos: Iroco, Guillermo López